jueves, 7 de noviembre de 2013

PRIORIDADES DE USO: EL ABASTECIMIENTO DE LA RIBERA

El abastecimiento de la Ribera del Júcar en Valencia, es un problema que a mi modo de ver, no puede entenderse desconectado de la gestión del agua en el Sistema Júcar en general. En este artículo, voy a intentar reflejar todas las posiciones encontradas y aunque no pueda aportar soluciones, al menos, sí puedo conseguir dar una visión global o de conjunto.
Se plantean cuestiones como contaminación por nitratos, prioridades de uso, derechos históricos, cuestiones que son tan interesantes como complejas.


El tema de las prioridades o preferencias  de uso del dominio público hidráulico es un tema que en un principio viene claramente regulado en el artículo 60 del Texto Refundido de la ley de Aguas, situando el abastecimiento de población e industrias de poco consumo de agua por encima de regadíos y usos agrarios y de los usos industriales para producción de energía eléctrica. Aunque este orden de prioridades puede establecerse específicamente en los Planes Hidrológicos de cuenca, deberá respetar en todo caso la supremacía del uso para abastecimiento.
Es más, toda concesión está sujeta a expropiación forzosa, de conformidad con lo dispuesto en la legislación general sobre la materia, a favor de otro aprovechamiento que le preceda según el orden de preferencia establecido en el Plan Hidrológico de cuenca.
Y esto, que podría parecer sencillo, a la hora de aplicarlo al caso específico de la Ribera no lo es tanto. Mi primer pensamiento cuando se me planteó el problema fue pensar: claramente es un uso prioritario y está la expropiación, ¿por qué las administraciones no actúan en consecuencia?. Menos mal que seguí investigando. Las alegaciones de USUJ presentadas al EpTI me convencieron de que podía ser esta la solución más fácil pero no la mejor.

El gran problema de la Ribera es la contaminación de las aguas subterráneas en su  comarca. Los vecinos consumen nitratos desde hace más de una década. La culpa es de la agricultura intensiva de regadío y del uso indiscriminado de pesticidas y herbicidas para abonar las tierras. Pero esta culpa  no es imputable a los actuales regantes, no es un problema que aparece de la noche a la mañana si no que la contaminación del acuífero se produce en decadas. Su efecto provoca niveles de nitratos superiores a los 50 miligramos por litro fijados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y en la Directiva de nitratos.
Las soluciones han pasado por distintas vías  incluso una  potabilizadora que abastecerá a la zona con agua sin nitratos. Esta obra que encadena retrasos desde 2010  no es la panacéa dado que potabilizar un agua de este tipo es sumamente caro.
En un principio la Generalitat  proyectó  una infraestructura para captar diez hectómetros cúbicos al año del acuífero del Caroig, en la partida de La Garrofera (Alzira), para  mezclar esta agua con los pozos con nitratos. Sin embargo, el informe de impacto ambiental puso de manifiesto que  el acuífero del Caroig carecía de caudal suficiente y que las extracciones supondrían una afección a Els Ullals del río Verd  o manantiales Massalavéses, zona declarada de especial protección. Esta solución se hizo inviable.

En algún momento se contempló la posibilidad de una permuta parcial de los derechos de aguas subterráneas por los derechos de aguas superficiales de los regantes.
El Consell  intentó alcanzar un pacto entre los regantes y los 13 ayuntamientos con problemas de nitratos para crear una comunidad de usuarios. Pero los regantes rechazaron la cesión  de sus derechos por consideran que podrían estar realizando una venta de sus derechos. Y afirmando que salvo que  les obliguen los usuarios tradicionales no ven con buenos ojos la cesión del agua que usan para el riego. Estas son algunas de las noticias que se han ido viendo en titulares de prensa, pero como siempre, la prensa nos da una visión casi siempre partidista de un problema, vamos a intentar ver ambas partes y el conjunto.

Lo primero que hemos dicho es que no podemos ver el problema de la Ribera desconectado del Sistema Júcar puesto que toda el agua del río está asignada. Por un lado tenemos los Riegos tradicionales de Valencia a los que se les está pidiendo que den una parte del agua superficial que usa y la intercambien por la subterránea contaminada con nitratos, y esto que puede parecer razonable no es la única cuestión de fondo. Cuando en prensa vemos titulares en la linea de "Los regantes de la Ribera Baixa deniegan ceder agua para abastecer a las ciudades"corremos el riesgo de posicionarnos en contra sin saber los  argumentos reales.

Los regantes, para garantizar la disponibilidad de recursos en periodos de sequía los regadíos tradicionales, en unión con los aprovechamientos industriales que había en el río en aquella época, construyeron el embalse de Alarcón y con posterioridad lo cedieron a la Administración a cambio de mantener unas posiciones en cuanto al uso del agua que en un tiempo fueron privilegiadas pero que han ido siendo reducidas. Los regadíos tradicionales han visto con el paso del tiempo recortados sus caudales como consecuencia del incremento del consumo urbano, industrial y de los nuevos usos recreativos, ambientales, los regadíos en Albacete y la disminución en las lluvias sobre la cuenca.
Los regantes no parece que tengan problema en ceder temporalmente esta agua siempre que sus derechos futuros no se vean comprometidos y siempre que no implique como extra unos gastos asociados. Si sustituimos el agua superficial por subterránea ¿quién asumirá los gastos de bombeo?.

Por otro lado tenemos la zona de la mancha Oriental con sus reivindicaciones históricas (parecería que son más antiguas sus reivindicaciones que su derecho al riego). Eso si no podemos olvidar que al estar en cabecera siguen teniendo el sentimiento de que el agua es suya y que no pretenden hacer concesiones en favor de una provincia Valencia que usurpa su derecho. Albacete en pocos años ha puesto en riego una superficie mucho mayor de la que ya explotaba y su reivindicación es más dotación de un sistema, el Júcar que no da  más de si. Los riegos tradicionales de Valencia pretenden que cualquier consideración de modificación de su asignación debe abordarse junto con reducciones en el resto de usos y demandas del Sistema Júcar, cancelando  la 2ª fase de la sustitución de bombeos de Albacete y elaborando un Plan realista para eliminar la afección del acuífero de la Mancha Oriental sobre el río Júcar.
 Por último, los múnicipios de la Ribera agrupados, los perjudicados, han sido los más defendidos por la prensa y con razón, recientemente  intentan presionar a las administraciones pidiendo soluciones y amenazando con trasladar al Parlamento Europeo la petición para que se "inste al gobierno de España a una actuación eficaz que resuelva de manera inmediata el problema existente por la falta de suministro de agua potable de calidad, libre de contaminación". A mi modo de ver esto no soluciona el problema, sino que quizás aún nos llevemos otra sanción de la Unión Europea, sanción que pagaremos todos y Europa no nos va a dar la solución porque esta pasa por el consenso y porque todos renuncien a algo. En las alegaciones al EpTI los ayuntamientos alegan que puesto que ha habido un ahorro  hídrico de aguas superficiales gracias a la modernización de los regadíos,  se les asigne sin necesidad de una permuta con los riegos tradicionales.
Las reivindicaciones de los municipios de la Ribera son totalmente legítimas agua potable de calidad y libre de contaminación pero si bien antes de la permuta o intercambio propuesto bombeaban agua subterránea parece que pretenden no seguir con los gastos del bombeo puesto que al tener un uso prioritario como es el de abastecimiento demandan parte de las aguas superficiales sin permuta alguna.
Como decía la solución no es sencilla y pasa no sólo por ese consenso y renuncia de todos los agentes implicado sino también por una labor de mediación de las administraciones que sin tomar decisiones radicales, como sería el expropiar las concesiones para el uso de riego supongan tutelar esta cesión permuta o intercambio.
En esta linea van la alegaciones al EpTI de USUJ cuándo dicen:
El procedimiento expropiatorio no es aconsejable y puede llevarnos a un camino sin salida y en muchos casos, a la absurda conclusión consistente en que, al final, la indemnización a pagar sería equivalente al importe de las obras que habrían de realizarse en el sistema de riegos del concesionario para poder regar con la nueva concesión reducida. 
Consideramos imprescindible que se abran los cauces de negociación entre las Confederaciones Hidrográficas y los usuarios y las Comunidades de Regantes afectadas, para, por la vía del diálogo y mediante un programa detallado de actuaciones, se puedan conseguir los objetivos compartidos por todos. 
Por tanto, hay que conciliar los cambios necesarios para atender las nuevas demandas con los acuerdos previos con los interesados o afectados por los derechos existentes, introduciendo un cierto margen de flexibilidad. 

Esto es lo que parece planteado la CHJ en el actual borrador del plan hidrológico del Júcar que actualmente  se encuentra  en fase de información pública y que en su artículo 28 dispone dentro del sistema Júcar las siguientes asignaciones:
i. Dentro de los usos existentes, dejando a salvo los de abastecimiento, se otorga la mayor prioridad a los riegos tradicionales de la Ribera del Júcar, considerando que tal prioridad es la expresión material y jurídica de su carácter histórico.
ii. Una vez satisfechas estas necesidades, se asignarán los recursos necesarios para el mantenimiento y consolidación de los riegos atendidos con la masa de agua subterránea de la Mancha Oriental, así como los atendidos con el Canal Jucar Turia.
iii. El resto de las áreas regadas de la cuenca y pequeños abastecimientos, industrias o regadíos diseminados deberán ser satisfactoriamente atendidos en los términos técnicos y jurídicos que determine su situación actual.
iv. Los recursos excedentes podrán aprovecharse para paliar la sobreexplotación de acuíferos y déficit de abastecimientos del área del Vinalopó-Alacantí y Marina Baja. El carácter de recursos excedentarios se definirá en las normas de explotación del sistema Júcar, a las que se hace referencia en el apartado D de este artículo.

Así pues, parece que la solución que todos pretenden es la misma: asignar agua del río Júcar al abastecimiento de la ribera. El problema es que esto supondrá un sobrecoste económico para alguien, y es aquí donde, como es natural, cada uno defiende la opción que más le favorece o menos le perjudica. Pero, como en muchas otras situaciones relacionadas con el agua, cuando interviene la prensa solo se habla del derecho que todos tenemos al agua gratuita, y se olvida de que tener el agua en el momento, lugar y condiciones de calidad que exigimos, sí cuesta  dinero y alguien tiene que pagarlo.

4 comentarios:

  1. Muy completa tu publicación y muy cierto las últimas palabras que como indicas se suelen olvidar "tener el agua en el momento, lugar y condiciones de calidad que exigimos, sí cuesta dinero y alguien tiene que pagarlo" y a veces por este motivo ciertas obras e iniciativas no se aprovechan porque finalmente nadie quiere pagar.

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  2. Nunca llueve a gusto de todos, como se suele decir, y el bolsillo que no me lo toquen, que también se dice. Entre los particulares tiene que mediar la Administración, buscando siempre el bien común, perjudicando a los menos para beneficiar a los más. Pero las medidas de la administración creo que son más políticas que otra cosa. Y la prensa tiende a buscar el populismo, cosa que tienen tremendamente fácil. Si no, mirar los recibos del agua, en los que los impuestos y tasas triplican el coste del consumo. La solución no es complicada: los políticos, bien lejos. Silvia, lamento haber llevado tu estupendo artículo a estos extremos, pero acabo de recibir el recibo del agua. 30 € de suministro, 95 € a pagar.

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  3. Hola Silvia. Soy vecina de La Ribera. Así que te podrás imaginar cómo me ha gustado que hayas tratado el tema. No recuerdo ni una sóla vez en que mi familia o yo hayamos bebido agua del grifo, así que te podrás imaginar... Como siempre la solución no es fácil y acaba reduciéndose a un tema económico, pero la sensación que tenemos los vecinos es que hay agua para Albacete, para Sagunto y para Valencia, ¿y cuántos años tardará La Ribera en tener agua de calidad? Un abrazo.

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    1. Hola María, mira lo que dice exArex, la factura del agua para el consumidor es mucho dinero. Tu como consumidor seguro que estás dispuesta a pagar lo que cuesta el agua del río tal como dice Silvia que lo plantea la CHJ. Así que pregunta a tus representantes políticos por qué no lo aceptan. O ¿es porque para ellos es mejor manteneros en esta situación para generar un clima de enemistad con Albacete o con Valencia?
      Yo que soy de Castilla la Nueva recuerdo cuando llegó Albacete y nos vendían que el trasvase al Segura llevaba agua para Murcia y en Castilla la Mancha tenían que limitarse a verla pasar sin tener agua en las casas. Hubiera sido muy sencillo hacer la infraestructura para llevar agua a los pueblos. Pero los gobiernos regionales prefirieron dejarlos como estaban y vender el cuento de que Murcia nos quitaba el agua y el gobierno nos ignoraba.

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